¡ No dejes para mañana lo que puedes leer hoy!
En
primer lugar, considero que la lectura ha influido en mi personalidad, ya que,
me ido formando a nivel personal y académico con ella, desde que aprendí a leer
hasta la actualidad. En consonancia con ello, desde una óptica crítica, la
lectura a veces ha sido un camino de piedras y otras en cambio una compañera de
viaje, aventuras y sueños. Por ende, recuerdo vagamente las lecturas
obligatorias que me han hecho leer a lo largo de todas las etapas educativas
(Primaria, Secundaria, Bachillerato, Universidad), ya que, mi relación con
estos libros, se basaban en la realización de una ficha de lectura, un examen
de lectura, o libros de didáctica o muy teóricos que carecían de sentido para mí.
En
segundo lugar, haciendo un viaje por el tiempo, en Educación Primaria mis
primeros inicios en la lectura están fuertemente vinculados a los libros de princesas
Disney, Manolito Gafotas, Cuentos para jugar de Rodari, Kika Súper Bruja.
Además viaje a un lugar de la Mancha de cuyo nombre no quieroacordarme…y mi
hice amigos de Don Quijote y de Sancho, me encantaban las lecturas de sus
aventuras en los libros de versión para niños. También recuerdo leer números
libros de la colección de Barco de Vapor y de Anaya, sobre todo en las
vacaciones de verano. Mi acercamiento con la poesía comenzó con Gloria Fuentes,
Versos Vegetales de Antonio Rubio, también conocí a Juan Ramón Jiménez, Lorca y
Alberti con la lectura de mi primer libro de poemas y Ciudad laberinto de Pedro
Mañas.
En
Educación Secundaria, mi infancia de Disney cambio con libros como Cuentos en
versos para niños perversos, Caperucita roja, verde, amarilla, azul y blanca,
el Ratoncito Feroz: Disney o el fin de la inocencia, o desde una visión más
crítica de la sociedad con el Principito o Mafalda. Con estos libros aprendí que la realidad de princesas que
me han vendido hasta ese momento en los libros,
mostraban una serie de
componentes discriminatorios y sexistas en los que se reflejaba una serie de
roles de género, valores y estereotipos que desde la educación se deberían cambiar.
Mi
competencia literaria en bachiller, se vio limitada, ya que, no recuerdo leer
poesía, los profesores de lengua querían prepararte para la temida selectividad centrándose en la literatura desde un punto de vista muy teórica, esta
concepción tan simplista de la literatura hizo que realmente me perdiera la
verdadera esencia de la poesía, reduciéndose esta solo a un conjunto de temas
sin sentido que había que estudiar, porque era lo mejor para nosotros o eso
decían…En esta etapa también leí a la Celestina de Fernando Rojas, Cien años de
soledad de Gabriel García Márquez , Fortuna y Jacinta de Pérez Galdós.
Respecto
a las tecnologías sí que es cierto que la sociedad de la información supone una
revolución en la forma de leer, por la variedad de dispositivos de lectura
(teléfonos móviles, tabletas, e-Readers), pero personalmente me sigue gustando
más leer los libros en el formato de papel, ya que, al leer un libro durante
mucho tiempo, a través de una pantalla, se me cansa la vista. En cambio, si son
artículos, noticas, prefiero leerlas en
formato digital.
Para
finalizar os dejo este audiovisual en el
que los Simpson hacen especial mención a William Shakespeare representado la
tragedia de Hamlet.
Me ha parecido una reflexión muy completa y las posibilidades intertextuales (y de predicción del futuro) de Bartolomeo y Homero son inmensas.
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