Práctica voluntaria. A través de tus gafas.

Alicia tiene 8 años, como yo. Es mi mejor amiga de la clase y de todo el colegio también. Es una chica rubia y lo que destaca de ella a simple vista son sus gafitas azules. Va muy guapa con ellas aunque no lo crea. Es un poco tímida pero habla con todos los niños y niñas en el patio; solo que algunos se ríen de ella y le llaman gafotas, cuatro ojos o pirata (porque hace poquito tiempo llevaba un parche en un ojo, ojo vago). A Alicia no le hace gracia que se metan con ella pero aun así es una niña muy risueña y feliz.

Todos los días le trae su mamá al colegio, a ella y a sus dos hermanas, porque su papá trabaja. A veces también venimos juntas al colegio. Me gusta porque en clase no podemos hablar mucho, solo cuando nos escapamos a sacar punta a los lápices (que en realidad ya tienen toda la punta fuera y lo único que hacemos es hacer más pequeño el lápiz). Nos encanta comprar material y estrenarlo juntas.

Como decía, Alicia es mi mejor amiga y nos gusta hacer muchas cosas juntas. A veces estamos en casa y jugamos o escribimos. Nuestros escritos son dedicatorias en agendas (somos unas artistas... la verdad, aunque poco creativas, todos ponemos los mismos mensajes). Además, redactamos muchas preguntas y nos pasamos el papel para ver las contestaciones de la otra y conocer sus gustos, miedos, aficiones, etc. Es divertido. ¡Y no solo escribimos en lápiz o boli sobre un papel! Hemos hecho hoy un mural con la pintura que nos ha sobrado y hemos estado toda la tarde riéndonos y escribiendo en mi terraza.

A veces hablamos de lo que nos gustaría ser de mayores, aunque queda mucho tiempo, Alicia quiere ser muchas cosas. Cada día me dice, muy contenta y decidida, que tiene claro que va a ser Periodista, Policía... la verdad es que Alicia puede ser lo que quiera. Ahora, quiere ser psicóloga y le gustan mucho los niños. Seguro que al final estudiará algo así.

Lo que no nos gusta nada son las lecturas que nos mandan leer en casa, porque salimos cansadas del colegio y lo que nos apetece es estar juntas en casa y jugar o ir al parque con sus hermanas también. Para hacerlo más divertido, a veces leemos cada una una página y las dos nos vamos enterando de la historia. Cuando preguntan en clase la verdad es que solemos contestar bien, intentamos entender lo que leemos aunque a veces es difícil o la lectura seleccionada no nos gusta. 

Lo que a nosotras nos gustaba era elegir el cuento que queríamos en infantil, o a veces por sorteo, pero era más divertido eso a que todos leamos lo mismo. Aunque leyendo todos lo mismo podemos hablar en clase. Pero pienso, y Alicia seguro que también, que leyendo cada alumno un cuento o libro (o incluso por grupos, el mismo libro) estaríamos más motivados con la lectura y con el comentario en clase.

Pero todo lo que digo no importa, no significa que no nos guste leer porque por suerte tenemos una biblioteca en el colegio (no podemos pasar mucho tiempo allí pero cuando podemos vamos) y tenemos muchos más libros para disfrutar o al menos revisar.

El préstamo de libros de la biblioteca es muy divertido y podría ser obligatorio que cada mes cada persona se llevase un libro y a final de curso hiciéramos algo chulo diciendo cuál nos ha gustado más, cuál no hemos llegado a leer porque no nos interesaba, etc. Así, al año siguiente y con un año más podríamos ver qué libros parecen más interesantes y nos motivaría a leer. No lo sé, es solo mi pensamiento.

Estoy segura que Alicia y yo tendremos una gran variedad de lecturas a lo largo de nuestra vida, y espero que muchas sean voluntarias y tengamos ganas de leer fuera de la escuela por gusto.

Todo esto que cuento es lo que siento de verdad, como alumna de tercero de primaria.

¡Adiós a todos! 

Alicia y XXXX -  M.A.P.S. mejores amigas para siempre

TQM (2002)